Un nuevo femicidio sacude a Mendoza. El cuerpo de Lucía fue hallado por un hombre que recolectaba leña en una propiedad abandonada de calle Pueyrredón al 4.413, en Rodeo del Medio. Cuando los efectivos llegaron al lugar del crimen lo primero que escucharon fue el sonido incesante de su celular, a metros de su cadáver. La nena no había llegado a casa y sus desesperados padres no paraban de marcar el número de su única hija.

A menos de 24 horas del brutal femicidio de Lucía González (15), ocurrido en Maipú. Los investigadores detuvieron al sospechoso del crimen: se trata de un menor de 14 años que fue señalado por testigos y vive cerca de la víctima, confirmaron fuentes policiales.

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Según trascendió el sospechoso vivía cerca del lugar donde se produjo el crimen y unos testigos declararon a la policía que habían visto ayer, cerca del mediodía, a Lucía y al adolescente detenido, cerca de lugar donde luego sería encontrada, sin vida, horas más tarde.

Estas declaraciones permitieron a la policía ir hasta la vivienda del adolescente y entrevistar a la madre y al chico, quien en ese momento habría terminado quebrándose y admitiendo haber sido el autor del femicidio.

Así las cosas, el fiscal de Homicidios Carlos Torres dejará el caso en manos de la Justicia de Menores para que siga la investigación del sospechoso que, por su edad es inimputable.

Por otra parte, el adelanto de la necropsia dio como resultado que la causa de la muerte fue una puñalada en la vena yugular que abría ingreso por la zona de la cervical. Por otra parte, se están realizando estudios para saber si la adolescente estaba embarazada.

Además, ya con la luz del día los peritos lograron ubicar el arma homicida en las inmediaciones del lugar del femicidio, en calle Pueyrredón al 4.413, en Rodeo del Medio. El agresor utilizó un cuchillo para asesinar de al menos 7 puñaladas a la menor.

Según las fuentes consultadas, el detenido habría confesado el crimen y remitido a la Justicia de Menores.

Lo que sabíamos hasta el momento

Ayer, una gripe obligó a la mamá de Lucía  a quedarse en cama, su padre se fue a trabajar. Ella salió a barrer. Eran las 10 de la mañana. A las 11 ya estaba esperando el colectivo en el lugar habitual, que por primera vez había llegado sin compañía de un adulto. Alrededor de las las 19 la encontraron a unos 4 kilómetros de allí con más de 7 puñaladas y una profunda herida en su cabeza provocada por un ladrillazo. La asesinaron brutalmente. Tenía 15 años y se llamaba Lucía Inés Fernández.

Según las primeras informaciones, la menor estaba vestida y a su lado tenía sus pertenecías, todas guardadas en su mochila. El hermetismo rodea a la causa que apenas lleva unas horas abierta, y si bien fuentes judiciales no han brindado mayores detalles, desde el entorno familiar trascendió que la menor fue abusada el año pasado y que había identificado a su atacante. Familiares hablaron de supuestas amenazas del agresor sexual a su víctima. Por esto, los investigadores posicionan esta hipótesis como la principal línea de investigación.

 Por otro lado Lucía había escapado dos veces de su casa. Una de esas veces fue encontrada en la casa de una amiga, al parecer sus padres sus padres la controlaban, estaban pendientes de ella y muchas veces no la dejaban juntarse o salir con amigas.

En el día ayer Lucía le dijo a su madre, Rosalba, que se iba al colegio, pero su “burbuja” no tenía clases presenciales. “Me mintió, pero no sé si se fue a encontrar con alguien” comentó entre sollozos la señora.

Fabián, el papá de Lucía, regresó a su hogar a las 10 de la mañana de hoy tras ir a reconocer el cuerpo de su hija. Bajó casi por inercia desde una camioneta en la que viajaba como acompañante junto a su esposa y un hermano.

Lloró desconsoladamente, dijo que aún no entendía lo que había pasado y entró a su casa. Segundos más tarde salió con un puñado de alimento para perros, le dejó en el comedero de su mascota y grito: “Solo pido Justicia”.

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