No quería perder más el tiempo… no tenía ninguna excusa… era el momento de romper el candado imaginario que la tenía presa, era tiempo de mirar más allá de sus narices…
Tomó un par de cosas, llevó algunas frutas para comer y se dirigió a la terminal a tomar el primer micro que saliera a donde fuera… era el momento de tomar coraje y hacer lo que siempre deseó, era tiempo de jugársela y salir al encuentro de su destino…
Ya en el micro estaba ansiosa, un poco nerviosa, emocionada y feliz; así todo junto… su cabeza parecía una pava a punto de hervir, pensaba mil cosas a la vez… se tranquilizó mirando el paisaje, entendiendo que era su momento de disfrutar el viaje, era su tiempo de llegar al lugar de sus sueños….
Y llegó no más… allí estaba parada frente a una verdadera postal, imprimió en su cabeza esa foto ideal de montaña, río, árboles, piedras y aire en su rostro… respiró hondo, tomo del suelo lo que llevaba y comenzó a caminar… era el momento de encontrar su lugar, era tiempo de hacer un nuevo hogar…
Caminó hasta llegar a una pequeña casa que se alquilaba, justo al lado del río, rodeada de flores silvestres y un aroma exquisito, no lo dudó, allí se quedaría…. Era el momento más importante de su vida, era su tiempo adorado….
Se acercó a hablar con los dueños, justo cuando ellos le entregaban la llave de la casa un hombre con valijas que le había llegado primero… no era el momento de desilusionarse, no era tiempo de volver a atrás…
El hombre se dio vuelta, se lo veía feliz con su llave en mano, en un instante que parecieron siglos ambos se miraron a los ojos, sonrieron y se prometieron volver a encontrarse… no sabía si era el momento de un nuevo amor, pero no era tiempo de perder el tiempo…
Los dueños se le acercaron mientras ella continuaba mirando al hombre de valijas, le comentaron que él había alquilado otra casa cerca de allí, así que ella gustosa alquiló aquella que tanto le gustó… era el momento de estar, era su tiempo de ser…
El hombre de la valija y ella no pudieron evitar encontrarse un poco más tarde… el destino es inevitable a veces, sus almas se habían perseguido por muchos años sin saberlo y se hallaron en el momento justo y el tiempo ideal….
