Quiero Decir

Mi diario digital…

Si te gusta Quiero Decir

Invitame un café en cafecito.app
Cuentos y Relatos Relatos

De la intriga sobre el paradero de los portones perdidos del parque, llega la misteriosa historia de los vitrales del Pasaje San Martín

El Pasaje San Martín, un edificio histórico por el que los mendocinos y mendocinas estamos acostumbrados a cruzar para acortar camino entre la calle 9 de julio y San Martín, en pleno centro de Mendoza, es también uno de los emblemas de la ciudad y guarda, entre sus valiosos tesoros arquitectónicos, uno que salta, literalmente, a la luz: sus bellos, míticos y misteriosos vitrales.

Los administradores del Pasaje San Martín, Osvaldo Aruani y Leonardo Aguilera, acompañados por el equipo de Cultura de la municipalidad de la Capital y la dirección de Patrimonio de la Provincia, no solo han encarado la restauración de esta joya del estilo Art Nouveau, sino que además, buscan reconstruir su misteriosa historia.

El misterio de los vitrales del Pasaje San Martín

En 1926, el bodeguero Miguel Escorihuela Gascón fue el pionero que quiso que se levantara el primer edificio en altura en Mendoza, una ciudad acostumbrada a reconstruirse después de cada sismo.

Escorihuela Gascón le encargó la obra a la compañía constructora F.H. Schmidt-John Becker quien, a su vez, puso en manos del ingeniero Ludwig Freude el proyecto. En la dirección técnica de la obra actuó el ingeniero Edmundo Romero, pero la idea artística salió de la cabeza, las manos y la creatividad del alemán Freude.

Aruani y Aguilera, los actuales administradores del edificio, se abocaron a reconstruir la historia del pasaje y encontraron mucha información, pero también muchos misterios.

Uno de estos misterios son los vitrales.

Se sabe a ciencia cierta -porque la misma investigación lo ha demostrado- que en la construcción del Pasaje se puso especial atención en el manejo de la luz natural, que está plasmada en el diseño de todo el edificio.

En esta idea se puede ubicar la intención de colocar vitrales en los techos, lo que no se tiene en claro es quién es el autor de esta obra de arte vítrea.

«Hemos investigado y pudimos ponerle una cara y un nombre al ingeniero que lo diseñó. Sin embargo, con los vitrales no lo hemos podido hacer, por el momento, aunque tenemos algunas ideas para seguirles el rastro», explicó Aguilera.

Lo que se sabe de ellos es que fueron fabricados en Francia, en hornos de carbón, por lo que hoy son irrepetibles. No pueden elaborarse partes faltantes de la misma forma que los originales.

Los vitrales representan motivos vegetales del Art Nouveau, cuya esencia es la inspiración en la naturaleza: las formas son orgánicas y la línea recta no interesa, las representaciones son plantas, flores, tallos, insectos, figuras femeninas.

El autor de los vitrales, como lo explicó Aguilera, aún es desconocido y la intención de colocarlos, también. No se ha llegado al motivo de su colocación, si fue a pedido de Escorihuela Gascón, o si fue pura intención de Freude a la que el bodeguero accedió. Lo cierto es que el Pasaje San Martín tiene varios detalles más provenientes del Art Nouveau que están en consonancia con los motivos que representa la obra de arte vítrea que corona el edificio.

Cómo se está realizando la restauración

Los vitrales han sido restaurados en varias oportunidades, pero esta vez, se pidió intervención al municipio y a la provincia porque había riesgo de caída de algunos paños.

Aguilera explicó que los paños que estaban más comprometidos eran de 1,10 mts que a su vez, están conformados por paños más pequeños, unidos con plomo. A algunos de ellos se les ha dado una curvatura para adaptarlos a la forma de la cúpula. Estos se habían vencido y los paños comenzaron a hundirse y perdieron la forma original

Esos ocho paños fueron los más urgentes de arreglar, pero lo que se va a encarar es la limpieza de los 300 mts2 de vitrales que conforman el techo del Pasaje San Martín. tarea que no será sencilla ni rápida, pero que ya ha comenzado y está a cargo del restaurador Esteban Grimmi.

El ingeniero alemán que buscó inspiración en Italia

Otro de los misterios es el mismo ingeniero que ideó el pasaje, Ludwig Freude. Se sabe que fue un alemán, que trabajaba para la compañía constructora F.H. Schmidt-John Becker, pero no hay en Mendoza otra obra realizada por él. Parece que misteriosamente hubiese llegado para construir el pasaje y luego, nada más se supo de él.

En este punto, Aruani destacó que se dice que Freude colaboró en algún punto, con la construcción de la Bodega Escorihuela, pero no está comprobado que así haya sido.

El único dato certero de esta compañía constructora, es que intervino en el comienzo de la obra de la que iba a ser la primera Casa de Gobierno de Mendoza. Comenzaron a realizar los socavones, pero después la decisión fue trasladarla.

En esos socavones fue que, tiempo después, se construyó el teatro Quintanillas.

Hasta el momento, es lo que se sabe de los bellos y misteriosos vidrios de colores que coronan el Pasaje San Martín.

La inspiración italiana tiene que ver con que en Milán se encuentra la galería Vittorio Emanuelle II, que es «la hermana mayor» del Pasaje San Martín.

El alma del Pasaje San Martín tiene forma de mandala

Aruani, quien preside la administración del Pasaje, es contador. Pero su amor por la belleza de este edificio lo ha acercado mucho más al mundo del arte. Para él, el edificio tiene un «alma». El asegura que es su teoría, pero al escucharla, cobra un sentido casi poético.

«Hemos podido detectar que el vitral de la cúpula central del Pasaje es un mandala. En sánscrito, mandala es un círculo y en todos los edificios de la antigüedad se sostenía la existencia de un mandala que representaba el alma del cuerpo físico de las construcciones»

La teoría de Aruani quedó plasmada en una fotografía del mendocino José Vicente, que ganó un premio en un concurso fotográfico en India.

Un lugar abierto al arte y a la cultura

Aruani quiere que para el 2026, fecha en al que el Pasaje cumplirá 100 años, su sueño de cambiar el sentido comercial un poco desordenado que adquirió este lugar, se transmute en espacio para el arte y la cultura.

Sin dejar de ser un lugar dedicado a los comercios, el administrador quiere que se pueda haber espacio para exposicionies de cuadros y obras de arte de autores locales, y hasta que pueda tocar una orquesta en vivo.

En definitiva, que el Pasaje brille nuevamente con las luces de antaño.

Ficha Técnica del Pasaje San Martín

  • Ubicación: Avda. San Martín y Paseo Sarmiento, Capital
  • Fecha de inauguración: el 11 de noviembre de 1926, durante el gobierno de Alejandro Orfila.
  • Proyecto: Ing. Ludwig Freude por la empresa constructora F.H. Schmidt-John Becker y Cia. (proyecto) Ing. Edmundo G. Romero (Direccción). Y Miguel Escorihuela Gascón (que fue miembro de la Constructora Andina en 1910).
  • Dirección Técnica: Ing. Edmundo G. Romero junto a T. Braun (de la firma alemana),
  • Propietario: el propietario original fue el bodeguero Miguel Escorihuela Gascón. Hoy pertenece a un consorcio de propietarios privados

1 COMENTARIO

DEJA UNA RESPUESTA

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Facebook
Instagram